Devocional Familiar:
Leer Levítico 21, orar y cantar juntos
Devocional Personal: Juan 11:38-44
“38Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta encima. 39Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días. 40Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? 41Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído. 42Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú me has enviado. 43Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera! 44Y el que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir".
La Gloria de Dios
Cuando Jesús llego al sepulcro donde Lázaro llevaba descansando por cuatro días, pidió que removieran la piedra que cubría la entrada de la tumba de su amigo. Marta le insiste a Jesús que debe haber mal olor por la descomposición del cuerpo de su hermano. Pero Jesús le pregunta: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? Luego Jesús le da gracias a Dios frente a todos y le pide a gran voz, ¡Lázaro, ven fuera! y el que estaba muerto, recupero la vida.
Si creemos, realmente veremos la Gloria de Dios. Veremos milagros como los de la resurrección de Lázaro. Su gloria no tiene límites, se manifiesta en todo lugar y todo momento. Si realmente pones toda tu fe en Jesús verás su Gloria a diario. Dios está con nosotros en todo momento y siempre se dejará sentir. Tenemos que estar enfocados para estar en su presencia.
Cuando logremos esto, todo lo que hagas, pienses o digas será para su Gloria y no la tuya. Tu vida familiar, las relaciones con tus amistades, tus jornadas de trabajo, todo será para la Gloria de Dios. Ya dejarás de vivir para ti, todo lo que hagas será para Él y lo harás con pleno gozo. Porque para esto fuimos creados, para adorarlo eternamente y gozarnos de su presencia aquí en la tierra y en la vida eterna. No hay nada mejor que mantener una vida enfocada en Cristo.
Desafio y Aplicación
Meditemos en estos versículos:
“Y el Verbo se hizo hombre y habitó entre nosotros. Y hemos contemplado su gloria, la gloria que corresponde al Hijo unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.” (Juan 1:14)
“Sin embargo, vemos a Jesús, que fue hecho un poco inferior a los ángeles, coronado de gloria y honra por haber padecido la muerte. Así, por la gracia de Dios, la muerte que él sufrió resulta en beneficio de todos. (Hebreos 2:9)
“Ha llegado la hora de que el Hijo del hombre sea glorificado - les contestó Jesús” (Juan 12:23)