Devocional Familiar:
Leer Deuteronomio 1, orar y cantar juntos
Devocional Personal: 2 Tesalonicenses 1:3-4
3 Debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, hermanos, como es digno, por cuanto vuestra fe va creciendo, y el amor de todos y cada uno de vosotros abunda para con los demás; 4 tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis.
El fruto de la perseverancia fiel en la aflicción (parte 1, la fe)
Después de su saludo, Pablo comienza con un elogio de los hermanos tesalonicenses por lo ejemplar que han sido en medio de la persecución. El primer aspecto del ejemplo de los tesalonicenses que Pablo comenta es que su fe “va creciendo.”
Una de las manifestaciones visibles de la gracia y paz de Dios en la vida de los cristianos que suffren afliccion es la fe.
¿Qué es la fe?
En nuestros días, estamos acostumbrados a escuchar muchas cosas erróneas acerca de qué es la fe bíblica. Algunos dicen que la fe es “creer en ti mismo.” Otros enseñan que la que fe se refiere a la intensidad de una emoción positiva. Hay algunos que piensan que la fe es meramente una decisión de la voluntad humana.
Sin embargo, debemos entender lo que la Biblia enseña acerca de la fe. La palabra que Pablo utiliza en el griego es pistis. La raíz de la palabra pistis es peitho, lo qual significa “persuadir.” Por lo tanto, podemos decir que tener fe en térmimos generales es estar bajo la persuasión de alguien. Es por eso que el autor de Hebreos define la fe como “la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” (Hebreos 11:1). En otras palabras, el autor de Hebreos enseña que poseer una fe bíblica signfica estar bajo la persuasión de Dios y estar convencido de sus promesas.
Aunque una definición de la fe es útil, no podríamos entender la fe bíblica sin los ejemplos de muchos de nuestros padres en la fe. Por lo tanto, Hebreos 11 está lleno de como nuestros padres estaban bajo la persuasión de Dios y perserveraron en la fe hasta el fin.
Además de los ejemplos en Hebreos 11, hay al menos cuatro enseñanzas bíblicas acerca de la naturaleza de la fe bíblica:
1.) Primero, vemos que la fe bíblica es un regalo de Dios. Efesios 2:8 dice, “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios.”
2.) Segundo, vemos que la fe bíblica es algo que la palabra de Dios produce. Romanos 10:17 dice, “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.”
3.) Tercero, vemos que la fe bíblica es un fruto del Espíritu de Dios. Gálatas 5:22 dice, “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe.”
4.) Cuarto, vemos que la fe bíblica es algo que se expresa en hechos. Santiago 5:17 dice, “Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.”
Desafio y Aplicación
La realidad es que todos tenemos una clase de fe. Todos estamos bajo la persuasión de alguien. ¿Estás bajo la persuasión de Dios hoy? ¿Estás convencido de la segunda venida de Cristo?
Si estas convencido de su venida, demuéstralo con la forma en la que vives hoy. Arriesga tu reputación y comparte el evangelio con alguien. Arriesga la oposición cultural y habla en contra del pecado y de Cristo como el único salvador.