Devocional Familiar:
Leer Números 23, orar y cantar juntos
Devocional Personal: 1 Tesalonicenses 5:2-3
“Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá, así como ladrón en la noche; que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.”
No hay escapatoria
Ayer estuvimos meditando en el día del regreso del Señor. Dijimos que llegará cuando nadie menos lo espere, así como un ladrón que llega de noche. Pablo dice que cuando la gente llegue a pensar que “no tiene ningún problema”, es cuando vendrá sobre ellos la destrucción. El apóstol lo describe como dolores de parto. Si ponemos atención, vemos como muchos viven una vida desenfrenada y egoísta. Es evidente la falta de conocimiento y temor a Dios. Solo tienen al mundo para imitar, su fin será desastroso y su destino no tiene escapatoria.
Gloria a Dios que por su misericordia no hemos sido consumidos. Dios mismo proveyó a su hijo para pagar nuestra deuda y darnos esperanza. Los que estamos en Cristo tenemos esperanza eterna. Podemos gozarnos en alabanza a nuestro Dios y vivir para su gloria. Sin embargo, no podemos olvidar que Dios uso muchas personas para compartir el evangelio con nosotros. Dios cambio nuestros corazones por el poder del espíritu Santo y a través de su palabra. Pablo les dice a los romanos, “De hecho, todo lo que se escribió en el pasado se escribió para enseñarnos, a fin de que, alentados por las Escrituras, perseveremos en mantener nuestra esperanza.” (Romanos 15:4 NVI) ¡Que mejor esperanza que subir al cielo con Cristo!
El no participar de la gran comisión es negar la propia esencia que Dios nos ha puesto en nuestros corazones. Estamos llamados a vivir en misión. Debemos ser misioneros donde quiera que estamos ya que no todos somos llamados a ser misioneros fuera del país. Dios ha llamado a personas especificas a hacer misiones internacionales y como iglesia debemos apoyarlos. Por esta razón, es importante ser fiel en nuestras ofrendas en la iglesia. ¿Sabías que Highview aporta parte de sus ofrendas a las misiones? Cada vez que das tu ofrenda con gozo, no solo honras a Dios, pero también contribuyes a la gran comisión.
Desafio y Aplicación
Que alegría es tener la certeza en que si somos realmente fiel a la Palabra de Dios nuestro fin será estar con Cristo en el cielo. Te exhorto a que medites en este versículo: “Por tanto, hermanos, sean pacientes hasta la venida del Señor. Miren cómo el labrador espera el fruto precioso de la tierra, siendo paciente en ello hasta que recibe la lluvia temprana y la tardía.” (Santiago 5:7 NBLA)