Devocional Familiar:
Leer 1 Corintios 5:1-13, orar y cantar juntos
Devocional Personal: Salmo 24:7-8
“Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará el Rey de gloria. ¿Quién es este Rey de gloria? Jehová el fuerte y valiente, Jehová el poderoso en batalla.”
Puertas abiertas para Dios
Los historiadores creen que el Salmos 24:7-10 se usó en el culto corporativo. La gente parada afuera de las puertas del Templo llamaba a los sacerdotes para que se abrieran y dejaran entrar al Rey de la gloria. Desde adentro, los sacerdotes preguntaban: "¿Quién es el Rey de la gloria?" La gente respondía: "El Señor, fuerte y poderoso, el Señor, poderoso en batalla". La pregunta se repetiría y la gente respondería:" El Señor de los Ejércitos, Él es el Rey de la gloria". Después de este diálogo entre el pueblo y los sacerdotes, las puertas del templo se abrían, simbolizando el deseo de la gente de tener la presencia de Dios entre ellos. Mostraba su sincero deseo de entrar en adoración. Hoy la presencia de Dios vive dentro de sus hijos. Cuando Jesús murió en la cruz, el velo que separaba el Lugar Santísimo del Lugar Santo se rasgó en dos. El lugar donde solo el sumo sacerdote podía entrar una vez al año ahora estaba abierto para todos (Éxodo 26:31-35; Mateo 27:50-51; Marcos 15:38; Lucas 23:45; Hebreos 9:3). Las puertas, en esencia, se abrieron permanentemente. Al confiar en Cristo como Señor, tenemos acceso a la sala del trono de Dios Padre. El Señor, fuerte y poderoso en batalla. Las puertas están abiertas, así que "acerquémonos con confianza al trono de la gracia, para que podamos recibir misericordia y encontrar gracia para ayudar en tiempos de necesidad" (Hebreos 4:16).El gran punto de estos versículos es el valor de este encuentro, el encuentro entre Dios y su pueblo. ¿Acaso no podemos celebrar lo mismo tu y yo estando en Cristo?
Desafio y Aplicación
¿Cómo nos acercamos al trono de la gracia para recibir misericordia en nuestro tiempo de necesidad? ¿Estás cultivando una vida de oración? Si no, ¿qué pasos puedes dar para buscar a Dios?