Devocional Familiar:
Leer 1 Corintios 1:1-31, orar y cantar juntos
Devocional Personal: Salmo 24:7
“Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará el Rey de gloria."
El Rey Regresa a su Reino
Comenzamos examinando el versículo 7 porque resume la esencia de todo el salmo. Este salmo celebra la venida de Dios a su casa en Jerusalén. En ese tiempo aun no se construía el templo, solo existía el tabernáculo con todos los detalles explicados en la ley en el desierto. Aquí el rey David celebra la venida del Rey Yahveh, el Dios de Israel. David reconoce que solo Dios es el “Rey de Gloria.” En los tiempos antiguos Israel solía cantar ciertos salmos como este salmo 24. Ellos solían ir juntos en peregrinaje mientras viajaban a Jerusalén a adorar a Dios. Estos salmos se llaman usualmente salmos de ascensión porque había que ascender o subir para llegar al tabernáculo en Jerusalén porque la ciudad estaba situada en un monte. Mientras iban ascendiendo los Israelitas cantaron este salmo. Que declara que Dios es creador, rey y merece toda gloria. Algunos eruditos dicen que este salmo quizás fue escrito para celebrar David pudo rescatar el arca del pacto y regresar a Israel. Quizás el pueblo canto este salmo en procesión mientras traían el arca del pacto con la presencia de Dios al tabernáculo. David escribió este salmo y habla de Dios como dueño del mundo. Los hombres que le vean serán los justos que le buscan. Luego expresa una imagen del rey de gloria entrando por las puertas eternas y siendo adorado.
Desafio y Aplicación
Tanto los cristianos como los incrédulos saben lo que es celebrar victorias. Cuando obtenemos un buen trabajo, cuando aprobamos un examen difícil, cuando una propuesta de matrimonio sale bien o cuando vencemos un obstáculo difícil. Pero ¿Sabes tu lo que es celebrar la victoria de Dios? ¿Sientes gozo real y deseos de cantar celebrando que Dios ha vencido y ha obtenido salvación para nosotros y gloria para su nombre? Te desafío a tomar un tiempo de cantar a Dios hoy con todo tu corazón.