Devocional Familiar:
Leer Nehemías 6, orar y cantar juntos
Devocional Personal: 2 Timoteo 4:1-2
“Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina”
Nuestra razón para vivir
Esta semana estaremos reflexionando en 2 Timoteo 4. Lo que Pablo describe en su segunda carta no solamente es un consejo ministerial para Timoteo. Pablo describe su anhelo profundo de mirar la vida de Timoteo, de la iglesia preservada por la fe (2 Timoteo 3) y la predicación fiel del evangelio. Pablo entendía que la prioridad en la vida no es lo terrenal, sino el ser conformado a la imagen de Cristo a través de las Escrituras y el trabajo del Espíritu Santo en la vida del creyente. Pablo, encarcelado en Roma y pronto a morir, sabía que su vida tenía el único propósito de expandir el Reino de Dios en la tierra a través del evangelio. Si tomas un tiempo en revisar la carta a los Filipenses, podrás mirar como Pablo deja claro que Cristo y el evangelio de su Reino son las motivaciones de su vida y muerte. Ahora, no sé tú, pero yo quisiera tener así de clara la perspectiva de la vida cuando los problemas aparecen, cuando la prueba empieza y cuando me siento confundida.
Pablo empieza 2 Timoteo con un “te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo”, la palabra “encarezco” aparece en 1 Timoteo 5:20 y en Hechos 2:40 y tiene la intencionalidad de explicar un testimonio solemne. Pablo va a testificar o declarar delante del Señor la urgencia de predicar la Palabra, de insistir, de contra-argumentar, corregir y animar con un corazón paciente y con una doctrina saludable. Además, Pablo reconoce la autoridad de Cristo, y menciona que Él es el Juez quien aplicará el juicio a vivos y muertos en su segunda venida. Para el creyente, la segunda venida de Cristo representa el enfoque de su esperanza presente. Y es en base a esa esperanza de estar cara a cara ante nuestro Señor, que la prioridad de la predicación del evangelio se vuelve nuestra principal razón para vivir.
Desafio y Aplicación
La predicación de la Palabra es una consecuencia directa de tu propio crecimiento personal en el conocimiento y amor hacia el Señor. El fundamento de nuestras vidas está descrito en cada página de las Escrituras. Te invito a sentarte unos minutos, abrir tu Biblia, leerla, meditar en ella y hacerte preguntas importantes sobre el texto que estás leyendo. Querido hermano quiero animarte a conocer a Dios, a buscar su rostro hoy, a memorizar la Biblia y a meditar en cómo el Señor te enseña su carácter en cada área de tu vida. Te animo a unirte a alguien más en la lectura de la Biblia, si hoy tienes la oportunidad. Reconocer que el valor de las Escrituras está relacionado con entender la autoridad del Señor. El valor eterno de conocer y amar al Señor reenfoca cada área de tu vida y se despliega hacia los que te rodean. ¿Qué hay en tu mente hoy?, ¿cuál es la meditación de tu corazón hoy?, ¿qué consume tus pensamientos?, ¿en dónde estás buscando tu refugio?, ¿cuál es tu fuente de agua viva?