Devocional Familiar:
Leer Deuteronomio 11, orar y cantar juntos
Devocional Personal: 2 Tesalonicenses 2:3-4
3Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, 4el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.
La Apostasía
En el día de ayer fuimos animados a permaneced en la verdad, y esto tiene una razon de ser. Hoy leemos como Pablo exhorta a la iglesia en Tesalónica a no ser engañada en ninguna manera sobre la venida del Señor, recordándoles que es necesario que ocurra ciertos eventos antes de la venida del Señor, identificando primeramente la apostasía y segundo la manifestación del hombre de pecado. Pero, ¿Qué quiere decir la palabra “apostasía”? La palabra apostasía se define como una deserción, abandono o desviación de la religión. A través de la historia vemos a apóstatas de la fe cristiana. En palabras sencillas, la apostasía es el rechazo de la verdad cuando parecía que la persona entendía y vivía en ella.
¿Cuáles son algunas características de la apostasía y de los apostatas? Parte del beneficio que tenemos en la Biblia es que Pablo describe la apostasía en sus cartas pastorales a Timoteo, sus características más sobresalientes son: que vendrá en los postreros tiempos (1 Timoteo 4:1), los hombres escucharán a espíritus engañadores (1 Timoteo 4:1 y 2 Timoteo 4:4), y abundarán doctrinas de demonios (1 Timoteo 4:1 y 2 Timoteo 4:3). En cuanto a la descripción de las personas en su conducta como apostatas, Pablo los describe en 2 Timoteo 3:1–5 como: amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes de los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de esta.
Pablo nos dice que es en medio de esta apostasía cuando se manifestara el hombre de pecado quien se opone y levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto (2 Tesalonicenses 2:4). El hombre de pecado, el hijo de perdición no solo se opondrá a la verdad, sino que se llamará a si mismo dios.
Desafio y Aplicación
El día de la gloriosa venida de Cristo no vendrá hasta que la apostasía haya llegado a ser un hecho y el hombre de pecado haya sido revelado. Así como las características de todas estas personas que no viven en la verdad, aunque creen estar haciéndolo. Este texto ha sido interpretado desde diferentes perspectivas escatológicas, pero hoy quiero animarte a mirar tu propio caminar. Quiero animarte a amar la sana doctrina y orar para permanecer en ella, pues el
fruto de esta será una vida que da gloria a Dios, siguiendo el ejemplo de humildad de nuestro Señor Jesus. Un claro contraste a la descripción de los que han apostatado.