Devocional Familiar:
Leer Éxodo 29, orar y cantar juntos
Devocional Personal: Galatas 4:27-28
“Porque está escrito: Regocíjate, oh estéril, tú que no das a luz; Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes dolores de parto; Porque más son los hijos de la desolada, que de la que tiene marido. Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa.”
Hijos de la promesa
Pablo comienza estos versículos haciendo referencia a la Palabra escrita en (Isaías 54:1) “Regocíjate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de la desamparada que los de la casada”. Luego el apóstol les dice a sus hermanos de Gálatas que ellos son como Isaac, que fue el hijo que Dios le había prometido a Abraham y Sara. Por eso Pablo le dice a los de galacias que ellos también son hijos de la promesa, como lo fue Isaac.
Dios le prometió un hijo a su siervo aun siendo un anciano de 100 años de edad y con una esposa de 90 años, aun así Abraham creyó en esta promesa de Dios. Por eso le llamamos a Abraham, el padre de la fe. Nosotros ahora creemos en la promesa de Dios de la misma forma que Abraham creyo en aquel tiempo. La promesa de que a través de la descendencia de Abraham llegaría el Rey de Reyes, nuestro Salvador y si creemos en Él, nos convertimos en hijos de la esta hermosa promesa. “Y Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa, ya que él también es hijo de Abraham” (Lucas 19:9)
Esta promesa se cumplió en Cristo (la simiente de Abraham). Dios nos trae la salvación gracias a al sacrificio de Cristo en la cruz. Si hemos creido en Cristo realmente somos hijos de la promesa. Que deleite el tener un salvador tan glorioso, majestuoso, justo y amoroso. La inclusion de todos los que creen en el pacto con Abraham es un gran milagro, quizas mas grande que una mujer con mas noventa años de edad dando a luz un hijo.
Desafio y Aplicación
Meditemos hoy en lo que dice la Palabra sobre los hijos de la promesa.
“Y, si ustedes pertenecen a Cristo, son la descendencia de Abraham y herederos según la promesa.” (Gálatas 3:29)
“Por eso la promesa viene por la fe, a fin de que por la gracia quede garantizada para toda la descendencia de Abraham; esta promesa no es solo para los que son de la ley, sino para los que son también de la fe de Abraham, quien es el padre que tenemos en común” (Romanos 4:16)
“Abraham: Todos los pueblos del mundo serán bendecidos por medio de tu descendencia” (Hechos 3:25)