Devocional Familiar:
Leer Deuteronomio 25, orar y cantar juntos
Devocional Personal: 2 Tesalonicenses 3:3
Pero fiel es el Señor, que os afirmará y guardará del mal.
El Señor es fiel
Las palabras de Pablo en este verso son poderosas sabiendo que el mismo, en carne propia, había vivido a través de las persecuciones a causa del evangelio. En este verso entonces el Espíritu Santo de Dios a través de Pablo nos anima a que confiemos en el Señor.
Muchas veces a causa del evangelio recibiremos distintas reacciones en contra de nosotros, pero mantengamos nuestra confianza en nuestro Señor Jesucristo, quien nos afirma y nos cuida del maligno. Pablo nos recuerda que el Señor que guardo a aquellos hombres que murieron como mártires a causa de la fe en Cristo y que fueron salvados por Dios del maligno, es el mismo Señor quien nos guarda a nosotros. Entre estos mártires tenemos a Esteban quien murió apedreado a causa del evangelio, a Juan el bautista quien fue decapitado y así mismo muchos más cristianos han padecido por el evangelio. Incluso hoy en el 2020 hay hermanos y hermanas que mueren a causa del evangelio de nuestro Dios Jesucristo, pero, aun así, Dios los ha librado del maligno. Como escribió Pablo en Romanos 8:38-39, “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”. Al contrario, la muerte es la vía que nos lleva a Nuestro eterno Dios, esa es nuestra confianza, ver a nuestro Salvador Jesucristo y estar junto a Él por la eternidad.
Desafio y Aplicación
Los animo hoy a mantener nuestra confianza en nuestro Señor Jesucristo. Él nos afirma para caminar en su palabra y nos cuida del maligno en todo tiempo. Y aún si morimos hemos sido librados del maligno porque ya Jesús nos compró para que no recibiéramos la ira eterna, sino para que estemos con él para siempre, por tanto, él nos cuida del maligno a cada minuto de nuestras vidas.