Devocional Familiar:
Leer Éxodo 20, orar y cantar juntos
Devocional Personal: Galatas 4:12-14)
“Os ruego, hermanos, que os
hagáis como yo, porque yo también me hice como vosotros. Ningún
agravio me habéis hecho. Pues vosotros sabéis que a causa de una
enfermedad del cuerpo os anuncié el evangelio al principio; y no me
despreciasteis ni desechasteis por la prueba que tenía en mi cuerpo,
antes bien me recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.”
Evangelizar en la adversidad
Pablo les recuerda a sus hermanos de la iglesia de Gálatas
que cuando él les llevo el evangelio por primera vez, él estaba muy
enfermo. También les hace recordar que ellos no lo rechazaron por su
enfermedad en aquel momento, sino que fue muy bien recibido, porque
él estaba dando buen testimonio con su fuerza espiritual aún cuando el
cuerpo estaba débil. Pablo fue luz ante ellos, cuando su condición se lo
impedía en la carne. El evangelio de Cristo que Pablo les predicó aquel
día no solo lo pudieron escuchar los habitantes de Gálatas, sino también
lo pudieron ver en su buena actitud, aún cuando él se encontraba en
adversidad.
“Al mal tiempo, buena cara” es uno de los refranes más comunes en
nuestra cultura. Andemos con nuestra armadura espiritual, armados
con la Palabra Santa, no debemos bajar la guardia, pero si estar siempre
preparados para ser victoriosos en Cristo Jesús. Gracias a Dios por el
Espíritu Santo que nos levanta cuando estamos caídos y derrotados. Por
qué “todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. (Filipenses 4:13)
No importa nuestras adversidades, ya sea en enfermedades, pobrezas,
perdidas, etc., siempre debemos estar listos para compartir el evangelio
de Cristo sin importar nuestras circunstancias. Firmes en la Palabra para
dar apoyo a nuestros hermanos y ser la luz en este mundo. Jesús nos
dijo: “Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas,
sino que tendrá la luz de la vida.” (Juan 8:12) Dios nos pide que seamos
más como Cristo, que aún en su adversidad se mantuvo firme, dando su
vida por nosotros. Gloria a Dios por su misericordia con su pueblo y por
permitirnos una relación con Él.
Desafio y Aplicación
Así como Jesús y Pablo aún en adversidad,
cumplieron fielmente con lo que Dios les encomendó. Cristo nos pidió
que lleváramos su evangelio a toda tribu, lengua y nación. Este mundo
pecaminoso nos puede provocar muchas adversidades para incumplir
con este mandato. Seamos fuertes en el Hijo, guiados en todo momento
por el Espíritu, para darle todo el honor y gloria a nuestro Padre. Les
animo hermanos y hermanas, que aún en tiempos difíciles, seamos
siempre de bendición para los demás.